Yo siempre quedo sorprendido, de la fuerza o poder que tienen las palabras en todo el ámbito social, ciertamente como herramientas que son, al igual que cualquier otra, se puede hacer bien o mal con ellas.
Para mi las palabras son como un destello de luz, según la fuerza de su origen, así de lejos llegara y perdurara. Pero en cuestiones interpersonales, es bien difícil medir todo el tiempo, con cuanta intensidad, decir lo que tenemos que decir. Mucha gente suele tomarse muy en serio todo lo que le llega a los oídos, según el interlocutor. Y se forman cada clase de conflictos, que a veces me causa estrés. Y es que yo pienso que lo dicho, aunque sea erróneo, no necesariamente debe tomarse como una declaración de guerra. Todos cometemos errores de apreciación y partiendo de ahí, lo que hoy decimos, mañana quizás ya no forme parte de nuestro pensamiento.
En mi trabajo, tengo dos compañeros en un conflicto que ejemplifica, lo que digo. El, es un tipo inmaduro y tiene poco tacto al hablar, despotrica y vocifera cada vez que se le antoja, para quienes lo conocemos, lo mandamos al carajo y seguimos el camino, como si con tigo nada que ver, pero llego ella, nueva, GI, sensible y muy estricta en sus cosas, y pracatan, se formo la grande.
Debo confesar, que Yo hay veces que según el día, tomo las cosas mas o menos en serio, pero me gusta en la mayoría de los casos, conversar con la persona del conflicto, por que pienso que es la manera adulta de hacerlo.
Lamentablemente hay muy poca gente dispuesta a tener una conversación adulta, renunciando a la posibilidad de resolver conflictos innecesarios. La idea errónea de que en los conflictos hay ganadores y perdedores, hace que algunas personas sencillamente no estén dispuestas a “perder” tronchando así la posibilidad de crecerse ante los ojos de los demás y de si mismos.
Una disculpa, no hace menos a nadie, según Yo lo veo, te hace digno y humano. Es ese momento de reflexión y entendimiento, en el cual nos damos cuenta de que no siempre estamos correctos en lo que pensamos y que si lo estamos, debemos aprender a comunicarnos con una mente más abierta y dispuesta.
Encontre esta pagina (consumer.es) que habla de los conflictos precisamente.
4 comentarios:
yo cogo las cosas en serio, pero hay personas que piensan que estoy chisteando pero digo la verdad... parece que es que cuando hablo siempre me estoy sonriendo...
Es naturelaza humana querer tener la razón y no admitir que se ha equivocado uno. Pedir perdón , decir 'lo siento' o 'me equivoqué' es una de las cosas más difíciles.
Cuando estaba recien casada me encontré que de momento mi marido( que de novios era todo dulzura y conplaciente) no admitía, ni muerto, que se había equivocado. No se si era machismo o que.
Comenzé a hacer cosas erróneas, a propósito; cosas insignificantes, pero a propósito me equivocaba. El no perdía la oportunidad de hacerme el señalamiento. Entonces yo aprovechaba y decia 'tienes razón, me equivoque'. Lo decia sin hacer el un 'big deal out of it'. EL se soprendia. Repetí el proceso varias veces, con paciencia. No pasó mucho tiempo cuando conmenzó a hacer lo mismo. ¿Como es que dice la canción de Shaquira? 'cuando hay que hablar de dos, empezar por uno mismo'. Siempre es bueno usarse a si mismo de ejemplo cuando queremos cambiar la conducta de alguien. Uso mucho esta estategia con mis hijas y me ha dado buenos resulatdos. "Se enseña con el ejemplo" y "Las acciones hablan más fuerte que las palabras".
Que hay Manny?, si, eso es un problema. Parece que tu quieres hablar en serio, pero sin la carga negativa de un rostros serio. Eso suele confundir, pero creo que quien te conoce, sabra cuando hablas en serio aun cuando tengas la caja de dientes tomando sol. Gracias por la visita loco.
Hola Goddess. Esa es buena, mostrar a la gente como se disculpa uno o cualquier otra conducta nescesaria y propia. Y es que esa experiencia tuya, nos dice que hay gente, sencillamente analfabeta social y emocional, como diria la de la tv y si nos intereza que crescan, hay que mostrarles como. Un abrazo.
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