Estuviera muerto, de no ser por que estoy vivo.

En este mes cumplo cuarenta, ¡¡¡SIP!!!, cuarenta añitos completitos. No se como les fue a ustedes, pero a mi me va algo raro. No estoy frustrado por la ocasión, más bien, estoy como a la expectativa, ¿De que?, no tengo idea.

Me rehusó ha hacerme el examen de la próstata, ¡¡¡no quiero, no quiero, no quiero!!! Y menos al que va mi padre, no se trata de tradición familiar. Ya se que hay otros métodos, pero según dicen, no hay como un dedo profesional, para saber si estamos bien de la bendita próstata, ¡que joderse!

No quiero ser un viejo común, de esos que solo escuchan el AM y buscan el cheque a principio de mes. Y estoy aterrado, ya estoy escuchando AM, con más frecuencia cada vez. Me consuelo pensando que es la madures, que estoy mas consiente de lo que pasa en el país-pura mierda- y es por eso que cambio casi espontáneamente a la banda AM. Hace poco llame a una amiga muy preocupado contándole sobre eso, pero solo se escucho una estruendosa carcajada al otro lado del teléfono. No le veo la gracia.

A veces observo a la gente, y me parecen robots. Odio eso, es triste sentir que un día, es igual al anterior y al otro y al otro…como si no hubiese cosas maravillosas en este mundo, como si no quisiéramos nada, excepto pasar por la vida desapercibidos.

Siento últimamente ganas de un cambio, de hacer esas cosas que he dejado para luego, y comenzar a hacerlas de una vez por todas. Creo que siempre contamos con que habrá tiempo para hacerlo, pero es falso, no contamos con más tiempo, que el que nos toca vivir, y eso puede ser ya.

La enfermedad de mi amigo, me he dejado un mensaje claro: vive hoy, ama hoy, ríe hoy, llora hoy… el mañana, es solo un deseo aun sin concretar. Cuanta falta nos hace detenernos a sentir, a escuchar, a vivir el momento. Apreciar esa felicidad efímera con la que contamos a diario, pero que ignoramos por una felicidad más absoluta, al menos eso esperamos. ¡Que ironía!

Tengo casi cuarenta años, y si me quedan mas por vivir, quiero sentir que vale la pena envejecer, no por que acumule años en el calendario, si no por que pase por la vida, enterándome de que pase.

(Sigur Rós)